Está de moda hablar de «la mujer real» como si existiera un caso de «mujer irreal». Mujeres muy delgadas, gordas o con estrías, ¿es que son un holograma? ¿Es necesario añadir el concepto real para poder aceptarnos? ¿Las mujeres de los anuncios entonces, no serían reales?
Parece que en el tema de la mujer, las críticas forman parte del día a día. A veces es por kilos de más y otras veces por kilos de menos, lo que está claro que es que siempre hay motivos para hablar del cuerpo de los demás o incluso de martirizarnos por el nuestro.
Y esto, ¿por qué ocurre? Nuestra mente emite juicios constantes, funciona estableciendo categorías. Conocemos que algo es alto cuando existe un bajo y viceversa. Esto, nos ha ayudado de forma evolutiva para evaluar el riesgo de determinadas acciones. ¿Es bueno o malo? Estamos creados para emitir juicios de valor de todo tipo. Además, si a esta propia característica de la mente le añadimos cómo la sociedad ha establecido unos cánones de belleza y consumo, encontramos que estamos en un continuo juicio con nosotros mismos, que puede volverse en nuestra contra. Una vez más, una característica normal y natural del pensamiento humano combinado con una situación social dan como resultado una sociedad obsesiva y patológica con el físico.
Encontramos que la belleza y el cuerpo humano cambian con el tiempo de forma natural y este cambio, lo percibimos como un error. ¿Suena absurdo verdad? Y si además, le añadimos que lo que se entiende cómo belleza está definido totalmente por el contexto vemos de forma racional que lo que se debería considerar como «normal» es todo tipo de diversidad. Solo hay que echar un ojo a nuestro alrededor.
Pero, ¿de que sirve saber todo esto? ¿es que acaso se le pueden dar razones a la mente para que te deje en paz? No. Esto que suena totalmente lógico no hace que dejemos de vernos bien o mal delante del espejo.
A nivel social, existen formas de combatir esta imagen de consumo donde establece etiquetas todo el tiempo y algunas maneras son:
- Dar visibilidad a todo tipo de personas en los medios.
- No caer en la absurdidad de la crítica.
- Ser más críticos con los cánones de belleza y menos con las personas.
- Observar la diversidad y encuentrar lo interesante que hay en ella.
- Cuestiona a tu mente constantemente cuando haga juicios a otros o a ti mismo.
- Aceptar a tus pensamientos como lo que son, simplemente pensamientos, sin otorgarles más importancia de la que tienen.
- Conocer a otras personas diferentes a ti. Otras razas, culturas u orientación sexual pueden ampliar tus miras y ayudarte a aceptar la diversidad.
Si después de leer esto, quieres aprender más sobre como relacionarnos con nuestra mente y mejorar la autocompasión con nosotros mismos y nuestros pensamientos. Te invito a leer este post.
Para terminar, os dejo por aquí esta maravilla de videoclip de LAPILI que engloba muy bien lo comentado durante el post.